Motivación

Creo que a todos nos pasa en algún momento; nos emocionamos mucho un día, tenemos un millón de ideas increíbles, las planificamos a la perfección y a la hora de la verdad, no pasa nada. Pero no es que no pasa nada porque no queremos que pase, si fuera así no hubiéramos concebido la idea en primer lugar; lo que ocurre es que tenemos una idea de lo que pudiera suceder a continuación, idealizamos demasiado las cosas. Está bien, siempre es malo esperarte más de la cuenta porque es mucho más fácil que te lleves una ingrata sorpresa, pero independientemente de eso, hay cosas que pueden sacarnos la emoción de un golpe.

Pondré mi ejemplo.

Después de estar casi desaparecida de Wattpad y, a pesar de saber muy en el fondo que nada será lo mismo (lo cual es ciertamente deprimente, saber que de un día para otro las amistades que construiste con tanto esfuerzo se vinieron abajo sencillamente por haber pasado un tiempo sin hablar) quise volver a intentarlo. Acomodé mi horario de actualizaciones, dispuesta a seguirlo, subiendo una nueva historia como recompensa para esas casi mil personas que me siguen allí, por esperarme después de tanto. Decidí actualizar solo fines de semana, además de por ser el momento en el que los demás están más libres, para así también darme tiempo para mis estudios. La primera semana fue muy bien, actualicé exactamente en el momento en que debía e incluso pude hacer una reseña. Entonces vino la segunda y comencé a escribir un nuevo capítulo de Caídos desde el lunes, para tener tiempo y llegar al viernes con al menos dos y de pronto las ganas… ¡¿desaparecieron?!

No sentí que valiera la pena. Sentí que daba igual que actualizara hoy o mañana, que realmente nadie me estaba esperando. ¿Para qué seguir el horario si a la larga da igual? ¿Para qué tener 992 seguidores si ninguno da señales de vida? Hace tiempo dejé de emocionarme por la cantidad de personas que me seguían porque supe que eso no valía nada si no me leían y comentaban, es cierto, pero igual da cierta rabia. Y sí, yo escribo por mí, si no lo hiciera no estaría entrando a un concurso diario fuera del internet, en «el mundo real»; ni hubiera publicado Caos. Pero siempre es bueno sentir aprobación, sobre todo cuando no estás muy seguro de lo que estás haciendo y necesitas fuerzas.

Entonces decidí dejar a un lado mi «mala experiencia» en Wattpad, hacer cosas por mí misma. Traduje el prólogo de Caos y por no dejar lo publiqué en la misma red social, pero también en WriteOn. Me creé una cuenta en SttoryBox para intentar probar cosas nuevas y además ideé dos proyectos de ilustración para comenzar a expandir mi portafolio. Pero estoy aquí sin hacer nada realmente, sin las ganas que me faltan, precisamente esperando una señal que me diga que voy por buen camino.

El lirio blanco de un tiempo para acá es mi señal, ¿cuál es la tuya?

5 comentarios en “Motivación

Deja un comentario